sábado, 21 de enero de 2012

domingo, 11 de diciembre de 2011

Let go, Let go


Supongo que ya no eres quien me dará mis lunas y mis estrellas en la noche, y supongo por el número de llamadas en mi celular, que quieres ser esa persona, ahora que ya dejaron de interesarme los colores de tu cielo.
Es cierto lo que dicen las canciones, se hace tarde y nunca parece que el día fuera a llegar pero llegó.
Ya no te amo, de hecho, siento que sólo te quiero de una manera muy sutil y medida y pensé que nunca iba a ser capaz, que siempre estarías ahí acechándome y que ningún hombre podría hacerme desvelar pensando besos que no fueran los tuyos.
Pero ves que lo he logrado. Ahora incluso, regalo estrellas. Fantaseo. Me hago agua y no es por tí.
No me acostumbro aún a rechazarte sin sentirme culpable por engañarme a mí misma, no se siente ni bien ni mal, simplemente no se siente. 
Es raro que ya no tengas la habilidad de hacerme añicos mientras te grito que te quedes con todas las fuerzas que caben en mi gargante, y después de varios años, al fin soy yo otra vez y me gusto.
Ahora viene el proceso, me quitaré la piel a jirones y borraré de mi boca tus besos. No botaré tu carta, es bonita y algún día querré leerla. Tampoco voy a cambiar mi cama ni a negar mi pasado contigo, pero de verdad me gusta esto de buscar un futuro al lado de otra persona, aunque sea por un momento.

Había olvidado lo bien que se siente sonreír de corazón.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Circulos Viciosos

Hasta el momento he tenido contacto sexual con seis hombres en mi vida, confesando que fui virgen durante quince años y después, pasé los cuatro siguientes con varias relaciones de pareja.
Soy una persona muy abierta mentalmente, liberada de tabúes, en cuanto a sexo se refiere al menos, pero por supuesto, de conciencia muy monógama y muy fiel. Siendo perfectamente consciente de que debo cuidarme, no venga cualquier imbécil a contagiarme cualquier mierda.

Digo estas cosas porque no me parece que sea algo de lo cual avergonzarme. Me he enamorado dos veces, he querido además a dos hombres en mi vida, y alguna noche me porté muy mal con un amigo, y otra noche con otro, supongo que de esos dos errores sí me arrepiento muchísimo. Pero no por ello creo que deba sentirme sucia, rara, perra o sola.
Eso es algo que bien saben hacer los hombres con nosotras las mujeres después del sexo, sobretodo si se acaba un vinculo sentimental que ellos le llaman 'polvo'.
Me ha sucedido que alguien me ha encaramelado con palabras diciéndome que soy la mujer de su vida, solo para llevarme a la cama. Claro después me despidieron un par de veces con un beso en la frente desde un taxi. No es algo de lo que esté orgullosa, pero qué puedo decir? las mujeres como yo a veces somos sensibles a las palabras. 
Pienso que así la vida no funciona. Los hombres se hacen los románticos para poder tener sexito con las amigas y éstas crean que son buenos y que valdrá la pena, y tienen que creerlo solo por ser mujeres. Mujeres que se hacen las estrechas y vírgenes inocentes porque les avergüenza decir que se han acostado con cinco, seis, siete y veinte tipos en un año, y dicen que 'nunca había hecho algo así', y el hombre por ser hombre se finge creerlo y se siente culpable por utilizar a la pobre niña pero tiene que satisfacer su necesidad de, debo repetirlo, hombre. Hombre que se supone ser el adecuado pero no lo es. Y en este adorable circulo vicioso de suposiciones y mentiras, los hombres quedan como unos destructores reyes y las mujeres como unas viles prostitutas, con corazón ajado y mucha ilusión perdida.
No sé las demás, ni mi grupo de anti-fans que me quieren dañar cuanta relación con un hombre ( de amistad o lo que sea) intento tener; pero en cuanto a mí, seis es un número precioso y me encantaría que el séptimo afortunado me diese motivos para que no hubiese nunca un octavo. Aunque eso pensé del primero, del segundo, y del tercero...

llamadme ilusa.